Institucionales

La problemática de la representatividad
Entrevista al Dr. Martín Arzaguet, presidente del Distrito VII de la Federación Bioquímica

• Dr. Martín Arzaguet, presidente del Distrito VII de FABA

En un distrito muy extenso, que abarca el centro y oeste de la provincia de Buenos Aires e incluye 30 localidades distantes entre sí y poco pobladas, sus autoridades reclaman una mayor participación de los bioquímicos asociados en pos de una mejora institucional.

• ¿Qué características particulares tiene el Distrito VII que usted preside?
Es el distrito más grande en cuanto a su extensión, abarca por la ruta 5 desde Bragado hasta Trenque Lauquen, y desde 9 de Julio hasta Junín, y desde Junín hasta Villegas por la ruta 188, y por la ruta 33 desde Villegas hasta Trenque Lauquen. Es el de mayor superficie pero a su vez el de menor densidad poblacional y de laboratorios.

• ¿Cuántos laboratorios hay en el distrito VII?
Hay 140 bioquímicos y 120 laboratorios pero además son todos laboratorios de medianos a chicos, es decir que no hay laboratorios de alta complejidad. Esa situación le da una característica particular que no deja de ser complicada porque sin laboratorios de alta complejidad, las derivaciones, que por lo general se hacen a Bahía Blanca, La Plata, y en algunos casos a Junín, afectan los costos de funcionamiento. Es un problema adicional teniendo en cuenta como están pagando las mutuales.

• ¿Con qué mutuales trabajan?
IOMA y PAMI fundamentalmente y después mutuales propias de la actividad agrícola-ganadera de la zona como OSPRERA (obra social del personal rural y estibadores de la República Argentina), que es complicada por lo lento de los trámites de autorización, y OSPIL (obra social del personal de la industria lechera) que es importante para nosotros y dentro de las prepagas OSDE es la principal, Swiss Medical tiene poca entrada. También están las obras sociales locales por ejemplo, una que armaron los círculos médicos (OSAM) que ahora tiene atención en centros en las ciudades más grandes del partido y otra en Junín, Family o Pequeña Familia, que tiene sanatorios propios con gran infraestructura que para nosotros significa una facturación importante y eso se hace todo a través del distrito. Es decir, que el distrito tiene una facturación propia, un valor agregado a lo que viene desde FABA. Eso permite que el Distrito tenga un ingreso extra por la administración aunque hay que reconocer que es un dolor de cabeza más porque muchas veces hay que pelear y estar encima para que cumplan con los compromisos.

• ¿Qué otros aspectos del funcionamiento del distrito puede comentar?
Un problema muy serio es la representación de todas las localidades que integran el distrito. Teóricamente la mayoría están representadas en esta comisión pero prácticamente somos muy pocos. Y esto se debe a que las distancias son muy grandes. En una época las reuniones se hacían los sábados pensando que era la mejor opción pero no resultó porque la gente dedica el sábado a sus actividades personales y familiares, asi que ahora las hacemos los martes a la tarde a eso de las 19 horas, después del horario de trabajo del laboratorio. En mi caso, estoy en Lincoln a 160 km de la sede del distrito en 9 de Julio y el viaje me demanda dos horas. Lo mismo les pasa a otros porque Trenque Lauquen está a 200 km y América más de 200. Y la reunión se extiende hasta las diez de la noche y cada uno tiene que volver. Es una situación de difícil resolución. Los que van a las reuniones son los colegas de Bragado, que están a 60 kmlos de 9 de Julio, aunque también son pocos los que van porque convengamos en que los colegas para protestar están siempre listos pero para participar de las reuniones no. También van algunos de Los Toldos, que está a 40 km. Sin embargo, también hay colegas, como el Dr. Pernas de América, con el que mantenemos una fluida comunicación telefónica. Como falta gente, los colegas jubilados siguen participando; el tesorero, Dr. Gago, está jubilado pero sigue a cargo, y que ni se le ocurra irse (risas).
Esta falta de interés, que en nuestra zona está agravada por el tema de la distancia resulta en una crisis de representatividad. Y para nosotros, que somos pocos y estamos manejando el dinero de las obras sociales locales de 144 bioquímicos y que son sumas importantes de dinero, representa una gran responsabilidad.
Necesitamos la participación para mejorar la gestión y la administración y para eso no es necesario estar presentes, con las herramientas de internet se puede aportar para hacer mejoras. Necesitamos mentes que piensen y aporten ideas porque cuanta más gente hay en una discusión surgen mejores propuestas.
El nuestro es un distrito que está funcionando con la mínima estructura: la sede, que es propiedad del distrito está en la ciudad de 9 de Julio con tres empleados administrativos y uno de limpieza. En una casa contigua funciona la proveeduría de EMSA.

• ¿Qué relación mantienen con FBA y PROECO?
Tratamos de que se hagan cursos usando la herramienta del PROECO. Hasta el año pasado el costo de los cursos lo asumía el distrito y para los colegas eran gratuitos. El problema es que los cursos de mayor demanda casi siempre están ocupados. En general se trata de que sean lo más concentrados posibles en uno o dos módulos. La opción de la de educación a distancia ofrece ventajas para muchos colegas interesados.

• ¿Qué tipo de actividad destinan a la comunidad?
El año pasado ya hicimos algo pero este año vamos a organizarlo de modo más orgánico porque de las escuelas de la zona nos llegan pedidos de materiales de laboratorio. Y como tampoco podemos comprometernos con todas las escuelas del distrito, se me ocurrió que cada ciudad proponga una escuela para proveerla de materiales o insumos de laboratorio o bien algún otro tipo de materiales, porque hay muchas escuelas técnicas. Para devolver algo a la comunidad teniendo en cuenta que el distrito, como entidad sin fines de lucro está para ayudar. También participamos dando charlas orientadoras para los alumnos del último año de la secundaria.
Además, el vicepresidente, Héctor Benítez, participa en la ciudad de 9 de Julio como representante del distrito integrándose a las fuerzas vivas de la comunidad en la Comisión Fiscalizadora del Agua, un movimiento de vecinos que apoya la gestión del intendente ante la empresa ABSA para exigirle soluciones ante el problema del hidroarsenicismo causado por el agua de red.