PAMI: se profundiza la crisis con los bioquímicos
El Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados sigue sin dar respuesta al reclamo de los profesionales del laboratorio de todo el país
La situación que en el último número de FABA Informa habíamos definido como "complicada" al describir la relación entre el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados y los bioquímicos de toda la Argentina, se agravó durante noviembre, al sostener el Instituto su postura de negar otro tramo del aumento capitario anual correspondiente a este año, sosteniendo esa posición en el falso argumento de una supuesta "disparada" de la tasa de uso.
Algunas fuentes oficiosas del Instituto, sin prometer nada, señalaron que "tal vez" se dispondría una mejora para los bioquímicos, pero sin admitir esa posibilidad como realmente cierta y menos aún, sin hablar de porcentajes.
Hay que recordar una vez más que en el marco del aumento anual para este año, el Instituto concedió un once por ciento en abril y un cinco por ciento a mediados de año, oportunidad esta última en la que a las clínicas y sanatorios privados se les reconoció algo más del doce por ciento, planteándose así una situación de irritante inequidad y, desde luego, de claro perjuicio para los bioquímicos que, con un acumulado de solamente el 16 % debemos afrontar el pago de una pauta salarial anual que se incrementó en un 35 por ciento, además del desmedido incremento tanto de los insumos importados como el de los servicios públicos, pasando también por una excesiva presión tributaria.
La CUBRA viene reclamando al PAMI desde hace meses una actualización arancelaria equitativa y sin discriminaciones, que permita a los bioquímicos poder mantener funcionando sus laboratorios.
La situación es realmente preocupante porque el PAMI constituye una de las principales fuentes de trabajo profesional. El Distrito I, que comprende a los bioquímicos de La Plata, Berisso, Ensenada, Magdalena, Puna Indio, Brandsen, San Vicente y Presidente Perón, a fines de noviembre se declaró en "estado de alerta" a través de un documento publicado en el matutino El Día de la capital bonaerense.
En ese comunicado, entre otros conceptos, se indicó que "los beneficiarios del PAMI conocen la excelente prestación que los profesionales de los laboratorios les brindamos a diario, sin demoras, asegurando la accesibilidad, la libre elección del laboratorio de confianza del afiliado y la total gratuidad de los análisis clínicos".
"No creemos merecer la discriminación sufrida por los bioquímicos ya que otros prestadores han tenido mayores actualizaciones. Nunca hemos dejado sin servicio a los beneficiarios del PAMI por lo cual pedimos la reconsideración de los aranceles en defensa de la continuidad de nuestra fuente de trabajo", se añadió en el documento del Distrito I.
No se debe olvidar que siempre el Instituto acompañó, con mejoras arancelarias acordes, al menos los porcentajes que se deben abonar en concepto de incrementos salariales a los empleados del laboratorio, y que este año, por primera vez, se produce un desfasaje de tamaña naturaleza entre un concepto y otro: un 16 contra un 35 por ciento.
La diferencia habla por sí sola sobre la política que ha tomado el Instituto; un brusco giro que los bioquímicos y los afiliados no merecen.
Se espera un pago del Seguro Público
La Federación Bioquímica de la Provincia de Buenos Aires espera que en los primeros días de diciembre, la cartera sanitaria bonaerense abone los meses de junio y julio, ya con el 33 por ciento de incremento, según lo acordado oportunamente.
Se debe recordar que ya se había abonado hasta mayo inclusive y que el 33 por ciento de incremento se pactó para aplicarse a partir de junio.
Por otra parte, se encuentra en vigencia el acuerdo al que arribaron la Federación Bioquímica con la obra social del Servicio Penitenciario Bonaerense, que se hace cargo en forma directa de los pagos de las prácticas no autorizadas por IOMA a sus beneficiarios, hasta un valor máximo de $800 pesos.
Esta decisión de la obra social del Servicio Penitenciario es digna de ser imitada por otros coseguros del IOMA, agilizando trámites tanto a los afiliados como permitiendo reducir los plazos de pago a los profesionales del laboratorio.
Prepagas
En otro orden, a fines de noviembre circuló de manera insistente la posibilidad de que el gobierno nacional autorice a las empresas de medicina prepaga a aplicar a partir de diciembre un incremento del seis por ciento al valor de las cuotas que cobran a sus afiliados.
Las autoridades de la Federación Bioquímica están a la espera de que esa posibilidad se concrete para salir de inmediato a sostener nuevas negociaciones con las prepagas médicas para lograr que al menos el mismo guarismo se traslade a un reconocimiento de los valores arancelarios de los profesionales del laboratorio.
El último incremento de las cuotas de las prepagas médicas fue del nueve por ciento y se aplicó a partir del primero de octubre.
La mayoría de esas empresas aceptaron trasladar el mismo incremento a los bioquímicos, a excepción de Galeno, la que hasta el momento ho ha reconocido mejora alguna.
Ante esta situación, la Federación Bioquímica se encuentra organizando una reunión con los Distritos para analizar los pasos a seguir.
Obras sociales
Por otra parte, en noviembre, el gobierno nacional transfirió a distintos gremios otros 1.784 millones de pesos destinados al pago de prestaciones de alta complejidad y que la administración de Cristina Fernández de Kirchner mantenía retenidos indebidamente, ya que pertenecían al Fondo Solidario de Redistribución (FSR)que maneja la Superintendencia de Servicios de Salud.
La transferencia de estos fondos se dio además, en el marco de las negociaciones que el gobierno de Mauricio Macri viene sosteniendo con la Confederación General del Trabajo.
La transferencia de estos 1.784 millones de pesos fue adoptada por una "decisión administrativa" publicada en el Boletín Oficial, en donde se puntualizó que en el Presupuesto 2016, aprobado en 2015, "no fue previsto el crédito suficiente en la partida requerida para hacer frente a la necesidad de fondos para cubrir el apoyo financiero a los Agentes del Seguro de Salud en lo que refiere a la cobertura de prestaciones de alto costo y baja incidencia y tratamiento de patologías crónicas de largo tratamiento".
Según publicó el periodista Ismael Bermúdez en un artículo en el diario Clarín, "el FSR llegó a acumular fondos por más de $ 30.000 millones sin contar los intereses. Desde mediados de este año pasaron a integrar un plan de salud para cobertura de hospitales, de los cuales la mitad quedaron consolidados en un bono del Tesoro Nacional a favor del FSR, cuyos intereses serán integrados a dicho Fondo para financiar el pago de prestaciones médicas. Scervino dijo que el FSR ya recibió $ 930 millones por los intereses de esos bonos". |
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