Institucionales

Respuesta de FABA ante nota periodística en matutino platense
Las autoridades de FABA enviaron el 16 de octubre pasado una carta dirigida al diario “Hoy” de la ciudad de La Plata en la que responden a acusaciones en relación con el convenio capitado con el IOMA. A continuación se transcribe la misiva

Señora Directora del Diario “Hoy” de La Plata - MYRIAM RENÉE CHAVEZ de SALCEDO
De nuestra mayor consideración:

Tenemos el agrado de dirigirnos a Ud. con relación a las notas periodísticas publicadas en la página 4 de la edición del día 13 de octubre del corriente año referidas al Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA).
En la nota principal de dicha página, titulada “El IOMA convertido en un agujero negro”, se hace referencia a supuestos “turbios negociados y sospecha de pagos de `retornos´ para cobrar deudas ponen en jaque a la obra social más importante de la Provincia”, para luego, al pie de la página, publicar un recuadro titulado “El oscuro manejo de prótesis y análisis de laboratorio”.
En el desarrollo de esta última nota, se expone que “el IOMA firmó un convenio con el Colegio de Bioquímicos en donde la entidad ejerce la auditoría, es decir, se controla a sí misma, y tiene la facultad de decidir si cumple o no la prescripción que hace el médico”.
Al respecto, esta Federación Bioquímica de la Provincia de Buenos Aires (FABA) se ve en la obligación de puntualizar que se ha deslizado un error, seguramente involuntario, en la información referida al convenio para la prestación de análisis clínicos a los afiliados al IOMA, toda vez que ese convenio nunca estuvo a cargo del Colegio de Bioquímicos sino que siempre fue ejecutado por nuestra entidad.
Aclarada esta cuestión, también nos vemos en la obligación de clarificar lo que se cataloga en la nota como “otro punto oscuro” haciendo referencia a la auditoría que se ejerce desde esta Federación sobre los pedidos de análisis clínicos.
En este sentido entendemos imprescindible poner blanco sobre negro en lo que hace a la relación a la ejecución del convenio de prestaciones bioquímicas que nos vincula con el IOMA, puntualmente en lo concerniente a las autorizaciones de los estudios prescriptos, todo ello con el espíritu de dejar expuestas algunas consideraciones y reflexiones sobre el particular.
Como punto de partida, creemos prioritario destacar que la relación entre IOMA y FABA se ha enmarcado, desde sus inicios, en una inveterada predisposición al diálogo y el entendimiento en la búsqueda de alcanzar los objetivos contractuales que tienen como fin último brindar un correcto y adecuado servicio al afiliado del IOMA.
Dentro del actual modelo de convenio por capitación impuesto por el IOMA desde el año 1993, que traslada a la FABA todo el peso administrativo de su desenvolvimiento, esta Federación asumió ese compromiso con responsabilidad y dedicación, pudiendo afirmarse que a lo largo de más de 15 años de esta modalidad contractual no se han producido conflictos serios con el IOMA ni tampoco con sus afiliados.
Más allá de lo hasta aquí señalado, resulta pertinente dejar en claro algunas pautas de acción que deben seguirse para desarrollar una buena administración de un convenio capitado, —pautas que el IOMA siempre ha respetado ejerciendo la responsabilidad de control que le compete—, y cuya mención coadyuvará al entendimiento y justificación del tema central de la presente, cual es “las autorizaciones para prácticas de laboratorio”.
Resulta innegable que con el concurso de recursos económicos finitos, el sistema capitado debe atender la satisfacción de dos tipos de intereses que si bien no son contrapuestos, son por lo menos distintos: la demanda prestacional, por una parte, y la retribución del servicio, por la otra. Así las cosas, la única forma de defender el sistema es a través de una auditoria responsable, basada en consensos científicos controlados por médicos y bioquímicos de FABA y auditores del IOMA.
El proceso de auditoría se desencadena, solamente, ante pedidos que superan en exceso las prescripciones habituales, ante reiteraciones de pedidos en períodos no justificados, ante la falta de coherencia entre el diagnóstico y los análisis solicitados, etc. De todos modos más del 80% de las órdenes de análisis mensuales no requieren auditoría y, del resto, una parte es sujeta a un requerimiento de ampliación de la información previo a su autorización, y en los otros casos se produce el rechazo o postergación de algunas prácticas.
Puede probarse que la regulación de las prestaciones no tiene como único objetivo el regular el gasto sino también administrar racionalmente los recursos. Es nuestra obligación evitar la prestación indebida que puede desembocar en la privación del servicio al que verdaderamente lo necesita. Tal como lo afirma Carrillo, “un sistema solidario de salud es aquel que cubre lo necesario al que lo necesita”.
Esta conducta, nos ha dado la posibilidad de dar respuesta a los incrementos de demanda prestacional provocados por la aparición de factores generadores de mayor consumo tales como, la sobre información de los medios que genera una presión del afiliado sobre el médico para efectuarse controles extemporáneos; la incorporación permanente de tecnología de alto costo dirigida a la prevención y cuidado de la salud que conviven con la atención de la enfermedad y que no estaban previstos en los convenios firmados años atrás; las innovaciones y adelantos de la medicina, como la cirugía bariátrica, que incluye controles de laboratorio costosísimos; fertilidad asistida; y las consecuencias de la judicialización de la medicina que deriva en conductas defensivas por parte del médico que prescribe aumentando innecesariamente la cantidad de prácticas solicitadas, etc.
El sistema de autorización previa para la realización de análisis clínicos que aplica la FABA como administradora del convenio capitado IOMA-FABA, está fundamentado en razones científicas, en defensa de la equidad, y teniendo como fin la salud y comodidad del afiliado. En materia de accesibilidad, fuimos los primeros en atender a los beneficiarios del IOMA en los laboratorios sin trámite previo, validando su empadronamiento on line y auditando todo desde el laboratorio.
Hasta aquí se ha expuesto la realidad del desarrollo del convenio FABA-IOMA, con la única intención de dejar en claro lo que en la nota que ha motivado esta presentación se menciona como “punto oscuro”.
Dejamos a su elevado criterio la decisión de hacer conocer a la opinión pública lo aquí manifestado, que en rigor de verdad es lo que se ajusta a la realidad, en cuyo caso solicitamos se respete literalmente la redacción y el contenido de este documento.
En el convencimiento que sabrá interpretarse debidamente la postura de esta Federación Bioquímica frente a la situación planteada, y quedando a su disposición, le hacemos llegar un atento saludo.