El Laboratorio de Endocrinología:
Las hormonas y el sueño
Conocer los ritmos circadianos de las hormonas y sus alteraciones patológicas es crucial en el Laboratorio de Endocrinología
• Miriam Colombani, bioquímica especialista en Endocrinología
Por Ana M. Pertierra
FABAINFORMA consultó a Miriam Colombani, bioquímica especialista en Endocrinología quien explicó que “en situaciones fisiológicas las hormonas tienen pulsaciones diferentes durante la vigilia que en el sueño, sin embargo en ciertas patologías por exceso de producción hormonal esos pulsos se pierden”. Y –aclaró– son notorios los ritmos circadianos en la secreción de las hormonas ACTH, cortisol, TSH, FSH, LH, estradiol, renina y péptido natriurético”.
Un complejo circuito conecta el reloj interno situado en los núcleos supraquiasmáticos en el hipotálamo medio basal con los factores externos como la luz que, al ingresar en la retina estimula a la glándula pineal que segrega melatonina, y ésta por vía endocrina, es decir circulando por la sangre, llega a los receptores tanto neurales como los que se encuentran en el hipocampo, hipófisis, hipotálamo, retina, y glándula pineal como en los no neurales en las gónadas, intestino, vasos sanguíneos y células inmunes.
“La melatonina hace su pico máximo durante la noche, se empieza a producir entre las 21 horas y las 7 de la mañana. El pico de melatonina coincide con el valor más bajo de cortisol, ya que el cortisol aumenta cuando uno se está por despertar”, explicó la bioquímica. Lo mismo ocurre con renina y aldosterona que están en los valores más altos durante las horas de sueño.
Los ritmos circadianos son las situaciones que se repiten con una periodicidad aproximada a las 24 horas pero también existen otros ritmos mayores como los mensturales en la mujer con un período que puede estar entre 28 y 32 días.
“La ACTH (hormona adenocorticotrópica que segrega la hipófisis) y el cortisol (producido por las glándulas suprarrenales) tienen patrones paralelos. Durante las horas de sueño se elevan tanto la ACTH como el cortisol lo que demuestra una relación directa o modulación positiva de la estimulación de la ACTH sobre la glándula suprarrenal y ésta responde segregando cortisol”, señaló Colombani. Y –agregó– al despertar se dan los valores más altos de cortisol que van bajando durante el día para llegar al valor más bajo a las 0 horas. Por eso cuando se sospecha una patología suprarrenal, por ejemplo síndrome o enfermedad de Cushing, patologías en las cuales hay un exceso de cortisol, ese ritmo se borra. “Para hacer el diagnóstico se indica hacer dos dosajes de cortisol en sangre, uno a la mañana y otro a la tarde. Si existe una diferencia mayor del 50% entre ambos valores el ritmo circadiano se mantiene pero si no la hay eso avala la sospecha de un tumor productor de ACTH o bien de una hiperplasia suprarrenal”, explicó la especialista.
Tanto en la enfermedad de Cushing que está provocada por un tumor o crecimiento excesivo de la hipófisis que produce un exceso de ACTH que su vez estimula a las glándulas suprarrenales en la producción de un exceso de cortisol, como en el síndrome de Cushing, donde el aumento del cortisol es de origen exclusivamente suprarrenal con valores normales de ACTH, no hay ritmo circadiano, el valor del cortisol está siempre alto independientemente de las horas sueño-vigilia.
Por su parte, las gonadotropinas (LH, FSH) muestran un patrón pulsátil característico según la edad.
“En la infancia los valores de LH son muy bajos y no tienen pulsos pero cerca de la pubertad aparecen pequeños picos durante las horas de sueño”, explicó Colombani.
Como sucede con todas las hormonas hipofisarias, la pulsatilidad de la secreción hormonal actúa para sensibilizar a los receptores y lograr efectividad.
“La FSH tiene pulsos también durante la edad fértil mientras que en la menopausia los valores son mucho más elevados y eso lleva a la desensibilización de los receptores”, puntualizó la bioquímica.
Otra hormona que se afecta por los períodos de luz – oscuridad es la TSH. “Si bien la variación de la concentración no es tan amplia, dentro del rango normal durante el día estaría en los límites inferiores del rango y durante la noche en los superiores”, agregó.
Mientras que la prolactina presenta picos nocturnos durante el sueño. “Los picos de prolactina están relacionados con los de melatonina y se lo denomina ritmo nictemeral”
Horarios de extracción de sangre
Cuando la indicación es un estudio hormonal, el horario de la extracción de sangre juega un rol clave. “Para la determinación de prolactina se aconseja que haya pasado al menos una hora desde el despertar hasta el momento de la extracción de sangre para normalizar las condiciones que permitan que los resultados sean reproducibles y comparables”. Y–añadió– yo soy bastante exigente con el horario de extracción, que en nuestro laboratorio es de 8 a 10 horas, porque si bien para otros analitos el horario no tiene influencia para las hormonas o sustancias relacionadas con el sistema nervioso el horario es muy importante porque se pueden dar variaciones significativas.
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