CALILAB orientado a una nueva
función del bioquímico: asesor clínico
Ajustando los últimos detalles de este encuentro organizado por la Fundación Bioquímica Argentina en la ciudad de Buenos Aires para el 10, 11, y 12 de septiembre, el doctor Daniel Mazziotta, presidente del comité científico, recibió a Faba-Informa para conversar acerca de los aspectos más relevantes del congreso.
¿Qué significado le han querido dar al Calilab 2008 a través de la premisa “Agregando valor en el Laboratorio clínico a través de la consulta centrada en el paciente”?
Cuando empezamos con el Calilab en 2000, la orientación del congreso estaba centrada en el laboratorio clínico y básicamente se desarrollaba sobre aspectos técnicos del laboratorio y así se fue dando en los encuentros sucesivos hasta 2006, momento en el cual y siguiendo la tónica internacional de que el laboratorio debía estar más cerca del paciente y del médico para colaborar en equipo, nos planteamos el cambio y ya en 2006 incorporamos médicos a la discusión de la calidad en el laboratorio clínico, a través de un esquema de ejes temáticos. Por ejemplo, ante un tema como la patología cardiovascular presentamos una conferencia para definir el cuadro y luego había un simposio bioquímico y otro médico-bioquímico donde la idea era que fuese el médico el que planteara los problemas que se le presentan en el diagnóstico y seguimiento, y los bioquímicos en la misma mesa trataran de responder a ciertos interrogantes basados en la interpretación de los resultados. Esos aspectos fueron planteados en el Calilab 2006, sin dejar de lado el concepto general del congreso anclado en el tema de la calidad, y fue muy bien recibido por los colegas. La discusión en equipo de un caso clínico, en definitiva, es arribar a la calidad en la atención del paciente.
Esta vez, incorporamos un nuevo aspecto a la función del bioquímico, la de asesor clínico. A través del lema del congreso, la función del bioquímico se definiría como información, interpretación, y asesoramiento, un valor agregado que aporta el bioquímico al médico en el momento de definir un diagnóstico.
La idea fue seguir con el mismo esquema de ejes temáticos, el cardiovascular, el renal, que no estaba en el anterior Calilab 2006, diabetes y los clásicos, el de alimentos, bioseguridad y hepatitis.
-¿Quién será el encargado de tratar el tema de la función de asesoramiento?
Para el tema de asesoramiento, como nosotros no tenemos experiencia probada porque no es una práctica común en este medio, y, como en Estados Unidos esta actividad de asesoramiento está reconocida profesionalmente, buscamos un especialista para abordar el tema del bioquímico como asesor clínico en la atención del paciente. Finalmente entre algunos nombres elegí al doctor David Bruns que fue el editor de la revista Clinical Chemistry durante 19 años y además es profesor en la Universidad de Virginia y tiene sobrada experiencia en el tema. Mi idea fue invitarlo a que diera la conferencia inaugural con el título “Agregando valor en el Laboratorio clínico a través de la consulta centrada en el paciente” para darle marco al congreso.
Para ser asesor del médico el bioquímico debe manejar los conceptos de sensibilidad diagnóstica, la especificidad del método empleado, valor predictivo de las pruebas, aspectos epidemiológicos que tampoco es algo común en nuestro medio. De allí que se planteó la conferencia plenaria que tendrá lugar el viernes 12 de septiembre a la mañana acerca de la exactitud diagnóstica de las pruebas de laboratorio también a cargo de Bruns.
-¿Este es un concepto similar al de la Medicina basada en la evidencia?
Bueno sí, hasta ahora nosotros (los bioquímicos) estamos trabajando puertas adentro. Hay que salir del laboratorio y encontrarse con la realidad. Si bien en algunos casos se da ese trabajo en equipo entre bioquímicos y médicos todavía no está de lo más difundido. Lo que sí hemos observado es que los médicos participando de estas reuniones científicas mixtas han podido evacuar sus dudas, canalizar sus necesidades. Un ejemplo, en el estudio del eje renal los médicos coinciden en que la determinación de creatinina debe ser estandarizada porque sino no resulta un parámetro útil para manejar al paciente. Los médicos lo sufren desde el manejo del paciente y nosotros (los bioquímicos) lo observamos desde el laboratorio. Casos como este son muy útiles de llevarlos a la discusión en un congreso de este tipo.
-¿Cuál es la diferencia más notoria con Calilab 2006?
Si bien la estructura del programa es la misma que la de ediciones anteriores, el encuentro de este año ha puesto el énfasis en el beneficio del paciente que en última instancia es el destinatario del accionar de las profesiones relacionadas con el ámbito de la salud.
-Hay una novedad en el programa, el eje temático denominado Proteómica, ¿qué conceptos incluye?
La proteómica es el estudio de todas las proteínas humanas capaces de ser sintetizadas y la relación entre la proteína y la información genética que la genera. Mediante los avances tecnológicos e informáticos se ha podido diseñar una base de datos accesible. Es un campo que todavía no tiene una aplicación concreta, tiene mucho de ciencia básica pero que existen proyectos internacionales, por ejemplo, el Consorcio Internacional par el estudio del proteoma humano, HUPO con sede en Quebec. Su presidente, el doctor Fernando Vivanco (España), es uno de los invitados extranjeros al congreso y hablará acerca de la reciente iniciativa cardiovascular de la Organización: la proteómica de las enfermedades cardiovasculares y el establecimiento y validación de nuevos biomarcadores diagnósticos y pronósticos. Es una característica de Calilab tener una sección destinada a los avances tecnológicos.
-¿Cuáles son los invitados extranjeros?
Tenemos al doctor Fernando Vivanco de España, David Bruns de los Estados Unidos, y Anders Kallner de Suecia que, estando retirado de la actividad, se dedica a dar conferencias acerca del controvertido concepto de incertidumbre de las mediciones de Bioquímica clínica.
En Argentina a un mes de la fecha es casi imposible saberlo porque, por lo general, el mayor número de inscripciones se dan a último momento. Sabemos que es grande la comitiva que viene de Venezuela, también viene gente de Guatemala, Perú, Uruguay. En el último encuentro fueron 230 los participantes extranjeros, casi el 20% de la asistencia total. Es muy probable que superemos los mil participantes porque batimos el récord de resúmenes de trabajos libres. Se presentaron 120, mientras que en el último congreso fueron 73. Creo que la asistencia va a ser mayor que en 2006, aunque francamente espero que no demasiado porque tendríamos problemas de espacio. En 2006 ocupamos el primer subsuelo del Hotel Intercontinental y para este año tenemos reservados dos subsuelos para el desarrollo del congreso.
-¿La industria de diagnóstico estará presente en el congreso?
- La exposición está totalmente vendida a una variedad de firmas. Eso fue todo un éxito.
Calilab se ha transformado en un clásico. Mucha gente lo tiene presente, lo tiene agendado como lugar de encuentro. Además junto con Calilab se realiza la III Jornada Latinoamericana de Calidad en el Laboratorio Clínico. En esta oportunidad, viene gente de Uruguay para el Simposio de enfermedad renal, y hemos armado un simposio latinoamericano para comentar las experiencias y usos de los programas de evaluación externa. Básicamente va a estar centrado en la trazabilidad de los calibradores y las necesidades que tenemos en ese aspecto.
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