Prepagas: marcha atrás
en aumento de las cuotas
El gobierno presionó para anular un incremento que regiría desde enero y que ya se había comunicado a los afiliados.
Jefe de Gabinete, Sergio Massa.
Las empresas de medicina prepaga decidieron finalmente dar marcha atrás con los aumentos de sus cuota del 10 por ciento que ya había informado a sus afiliados, luego de intensas negociaciones con el Gobierno, en especial, con el secretario de Comercio, Guillermo Moreno.
Los encargados de anunciar el entendimiento fueron, casi al unísono, el jefe de Gabinete, Sergio Massa, y el ministro del Interior, Florencio Randazzo, quienes señalaron a periodistas que las empresas dejarán sin efecto el incremento.
Apenas conocido el aumento, Massa había lo considerado "inoportuno y fuera de lugar" y garantizó que el Gobierno va a utilizar "todas las herramientas que tiene el Estado, con la Secretaría de Comercio y el Ministerio de Salud, para poner un freno a esta medida".
Massa también reclamó al Senado que "ponga un marco regulatorio con previsibilidad, tanto para la gente que consume estos servicios como para las empresas que lo brindan".
"El aumento es inoportuno y fuera de lugar", porque "es una medida que desalienta las expectativas de los sectores medios en un momento de crisis internacional donde todos debemos poner el hombro, todos debemos ayudar para que el nivel de empleo de los argentinos se mantenga", afirmó el jefe de ministros.
Opinó que "en el mediano plazo, es fundamental que el Congreso ponga un marco regulatorio con previsibilidad, tanto para la gente que consume estos servicios como para las empresas que lo brindan".
Por su lado, Randazzo calificó de "insensibles" a las prepagas que anunciaron un aumento de la cuota a sus afiliados y aseguró que "el Gobierno no permitirá" que se implemente la medida.
"No hay ninguna razón para avanzar con un aumento", enfarizó Randazzo, quien agregó que "en un momento en el que todos debemos hacer un aporte para cuidar el bolsillo de los argentinos, querer castigar a los afiliados con una suba injustificada habla de un grado de insesibilidad de parte de estas empresas que no estamos dispuestos a admitir".
Mediante un comunicado, el funcionario anticipó que "el Gobierno no permitirá que se juege con la salud de los argentinos", sin importar de que "sector social se trate".
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