Descubren
la causa genética de la falta de eficacia en algunos pacientes
de fármacos contra la hipertensión
Científicos de la Universidad de Glasgow (Escocia) han descifrado
por primera vez una localización genética que explica por
qué determinados fármacos para la hipertensión no
son eficaces para algunas personas. El descubrimiento, dado a conocer
a través de un estudio presentado durante el Congreso de Investigación
de Hipertensión de la Asociación Americana del Corazón
2005, permitirá el desarrollo de tratamientos para estas personas.
La hipertensión arterial no controlada puede conducir a ictus,
ataque al corazón, fallo cardiaco y de riñón. La
Organización Mundial de la Salud estima que los niveles de presión
sanguínea no óptimos son responsables del 62 por ciento
de la enfermedad cerebrovascular y el 49 por ciento de la enfermedad cardiaca
isquémica. Según los expertos, se desconoce la causa de
entre el 90 y el 95 por ciento de los casos de hipertensión, pero
es probable que se deban a múltiples factores genéticos
y ambientales.
En esta ocasión, los científicos estudiaron a un extenso
grupo de familias caucasianas con hipertensión grave para intentar
identificar la localización de algunos de estos genes. A su juicio,
una vez conocida la localización del gen o genes, será más
sencillo dirigirse a ellos.
La investigación incluyó 2.142 familias caucásicas
con hipertensión grave. Los investigadores registraron los fármacos
que los participantes del estudio tomaban para controlar su hipertensión
y midieron su presión sanguínea después del tratamiento.
Los investigadores identificaron a 889 parejas de hermanos que no respondieron
a los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (ECA) y a
los betabloqueadores y a 76 pares de hermanos que no respondieron a los
bloqueadores de los canales de calcio y a los diuréticos.
Entonces recogieron y analizaron muestras de ADN de todos los hermanos.
Utilizando técnicas de análisis genéticas localizaron
una región en el cromosoma 2 que parece participar en el origen
de la hipertensión en personas que no responden a los inhibidores
ECA y a los betabloqueadores.
Fuente: Agencia Europa Press
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