Salud
La proteína C reactiva como indicador del riesgo cardiovascular

La detección de las personas que tienen mayor riesgo de obstrucción en las arterias es una estrategia que ayuda a bajar la incidencia de las enfermedades cardiovasculares. La evaluación del nivel de riesgo se realiza por medio de la investigación de diversos factores como el colesterol, la obesidad, la edad, el sexo, la diabetes, la hipertensión, el hábito de fumar y la historia familiar. En los últimos años se ha empezado a considerar el impacto de otros factores de riesgo alternativos entre los cuales se destaca el nivel elevado de la proteína C reactiva (PCR). Un trabajo publicado por investigadores holandeses analiza la capacidad de la PCR para identificar a las personas en riesgo.
"Los factores de riesgo tradicionales solamente explican una parte de la incidencia de la enfermedad cardíaca coronaria. Por lo tanto se necesita mayor esfuerzo en la búsqueda de nuevos factores que permitan mejorar los modelos de predicción actuales. En los últimos años se ha demostrado que la proteína C reactiva es un marcador de riesgo de enfermedad cardiovascular. Actualmente, la investigación se focaliza en evaluar la utilidad de la medición de PCR en combinación con los factores de riesgo tradicionales", indicaron los especialistas del Centro Médico Erasmus, ubicado en la ciudad de Rotterdam, Holanda.
Los científicos realizaron un estudio del tipo caso-control en el cual identificaron a 157 personas con infarto (casos) y a 500 individuos sin problemas cardíacos (controles). Los participantes del estudio eran hombres y mujeres mayores de 55 años que vivían en un barrio de la ciudad de Rotterdam. Los investigadores tenían muestras de sangre de todos los participantes que se habían obtenido al inicio del estudio. También tenían información sobre los factores de riesgo tradicionales como los antecedentes familiares, la presencia de hipertensión, la edad, la diabetes, el consumo de cigarrillos y el índice de masa corporal.
La evaluación de PCR se realizó por medio de dos procedimientos que tienen buena coincidencia (ensayo inmunoenzimático y método nefelométrico). Los valores de PCR superiores a 10 miligramos por litro se observaron en el 10,8 % de los casos y en el 3,2 % de los controles. El valor promedio de PCR en el grupo de control fue de 1,68 miligramos por litro, mientras que el promedio de PCR en los casos llegaba a 2,18 miligramos por litro.
Cuando se analizó el nivel de riesgo de infarto en función de la concentración de PCR se observó que el "odds ratio" de infarto (OR) es igual a 2,0 cuando la PCR es alta. En cambio, si se tienen en cuenta a todos los factores de riesgo tradicionales (colesterol total, colesterol HDL, diabetes, hipertensión, cigarrillo, obesidad y antecedentes familiares), el OR de infarto cuando la PCR es alta es de 1,2.
"Nuestro estudio muestra que el nivel de PCR predice la incidencia del infarto de miocardio en la población mayor, pero esta predicción no es independiente de los factores de riesgo tradicionales que se evalúan en forma rutinaria. Los resultados de este estudio sugieren que la medición de PCR en la práctica clínica no mejora la habilidad para predecir el riesgo cardiovascular. El Estudio de Rotterdam (The Rotterdam Study) es un trabajo prospectivo con abundante información sobre factores de riesgo cardiovascular de cerca de 8.000 participantes. En nuestro conocimiento, este es el primer estudio que investigó el valor clínico de la medición de PCR en combinación con la evaluación de los factores de riesgo tradicionales", destacaron los autores en un reciente artículo publicado en la revista Archives of Internal Medicine.